hoy te propongo...
Entender de repente el entreacto entre la tragedia y la comedia; remar por esa minúscula rendija hasta captar los matices de los peces más extraños. Y pescar margaritas en el fondo del río. Margaritas mojadas de agua dulce con pétalos del color de todas las paletas.
Enfriar dinosaurios con un solo bostezo.
Reclamar a la tarde el desliz de la aurora y el insulto del atardecer.
Hojear guías telefónicas con los ojos cerrados, hasta sentir el impulso en la punta de los dedos y apuntar a ese número: justo, a ése. El del señor que llamaremos a continuación y que desde hoy se convertirá en nuestro segundo mejor amigo.
Cantar "Singing in the rain" en esta tarde de sol, hasta provocar a todas las nubes visibles en el horizonte a llover tupidito. Y entonces...ah, entonces...¡bailar, también!