viernes, 30 de julio de 2010

poemita

Si mis oídos pudieran
traducir toda la magia
que les regala la música,
generosa, arrebatada,
probablemente serían
florcitas libando peces,
malvones comiendo amores,
retazos de niñez blanca.
Probablemente serían
lucecuitas en los ojos,
manojos de pequeñeces,
alimento de gorriones.
Tal vez fueran primaveras
embaladas, para usar
cuando un amor se nos quema,
cuando nos engulle el mar.
Y quizás fuera una pista
para salir a buscar
la magia que recordamos,
y olvidamos invocar.

martes, 27 de julio de 2010

pa'ti

Ver caer la tarde, tarde de un día diáfano y azul. Después de una siesta bastante sobresaltada, despertar y comprobar que no era para tanto.
Acceder a los mundos dentro del mundo; mi mundo se multiplica en múltiples caras, múltiples vidas, múltiples rutinas.
Jugar a que no es cierto que falta algo, subir y hacer escala en algún milagro.
Sondear el rostro gris de la mala onda y bailarle una zamba, por si las moscas.
Cantarle las cuarenta a la mala racha, enfrentar a la afrenta con las bengalas.
Y salir disfrutando de cada paso.
Y volver, calentita, a tu regazo.

domingo, 25 de julio de 2010

tempranito

Despertar a tu mundo, oler las mismas flores,
zapatear el futuro contando amores...
Enfrentar los pasados dando la espalda,
injertar el presente desde la planta.
De pura base limpia, presente nuevo;
de puro alta la meta, parto del suelo.
Quererte sin quererlo, por carambola.
Treparme a tu concierto desde la ola.
Amarte sin medida, quererte tanto
que el odio se agote, muera de espanto.
Quererte más que a nadie, y más que a nada.
Querer el niño ése, de tu mirada.

sábado, 24 de julio de 2010

me pasa que...

Sin contar todas las tonterías
que inundan mi cabeza loca,
ni la cantidad de sinsentidos
que acuden apurados a mi boca;
sin desmayar el grueso del sentido
por decir una sutil estupidez,
ni destronar al dios de los latidos
por razonar sin media sensatez;
sin ahuyentar al rey de los cumplidos
por su último elogio, bienvenido,
ni descartar al rey de los aguantes
por conservar la paciencia de antes,
te digo que madrugo y ya lo extraño,
y aunque dice que está aquí constantemente,
si me dejo sentir, claro, lo siento;
si no, salgo a buscarlo: estoy demente.

jueves, 22 de julio de 2010

divagaciones en red

En medio de una luz difusa que acorrala las sombras sin esfuerzo, me siento a disfrutar de este silencio como si fuera otra la vidala.
Me caigo y me levanto. Me destino. Me busco y me reencuentro sin pensarlo.
Me hundo en el tumulto de mis pasos, para verme parada en un rincón, mirando desde lejos las pisadas, y buscando balcones con su flor.
Me callo, y no quisiera ya rimarme. Quiero aburrirme de mí misma, hoy. Pero bailan los versos en mi mente, y con ellos, bailando, vuelvo, y voy.

martes, 20 de julio de 2010

amigos

Amigos de colores, amigos a ladistancia, amigos viejos, amigos nuevos, amigos reciclados...
Me pregunto para què otra cosa será la vida además del amor y los amigos.
Ya lo dijo un catalán que no quiero nombrar pero estoy mirando: "les coses més importants de la vida: els amors i els amics".
FELIZ DÍA a todos los que conozco y que, de cuando en vez, pasean por estas páginas, ; FELIZ DÍA también a tantísimos amigos virtuales a los que no pierdo la esperanza de poder abrazar algún día, Y, por supuesto, FELIZ DÍA a los de siempre, a ésos que no necesitan ser aludidos para saber que el lup dup de mi corazón va al ritmo de los suyos.

jueves, 15 de julio de 2010

nuevos aires

Pensaba en los adalides de la supuesta Nueva Era.
Pensaba en tanto amoroso devoto de lo que sea.
Pensaba en tanto voluntarioso que cree que puede ordenar la vida ajena.
Pensaba en todos los que no se meten nunca con nadie, y en este caso se metieron.
BIEN por la ley del matrimonio homosexual. Me gustan los varoncitos, desde siempre. Pero mucho más me gusta que la gente sea feliz, sin importar cómo, mientras no joda a nadie. Y la verdad es que si todas las minorías se respetaran así, otro sería nuestro cantar.
Madurando, Argentina!...

martes, 6 de julio de 2010

como iba diciéndote...

Y te busco en todas partes encontrándote en ninguna.
¡Voto a la Diosa Fortuna, que te diera el escondite!
Rechazando mil convites voy, buscándote, a la Luna;
cansada de trajinar, vuelvo despacio a mi casa,
y al subir a la terraza a espiar un poco el Sol...
¡ay, me sorprende tu amor, que en mi corazón descansa!