domingo, 21 de junio de 2009

domingo

Luchando con los debes, los haberes parecen
montar guardia. Si los roza el murmullo
de los trenes, los subleva el chasquido de paraguas.
¿A quién sonreirán las primaveras
después de conocer el Paraíso?
Enfrascada la turba en su delirio
no distingue mensajes ni carteles.
¿Por qué, de qué, a quién le habla
la lengua que no sabe lo que dice?
Vení, pasá, no temas: hay remedio
para tus cicatrices.

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