A veces miro hacia atrás y, como decía un viejo libro de autoayuda, me río: tanto hacerme drama por nimiedades, y viene la vida y me arrolla con su fuerza, y me deja patas arriba, y de a poco empiezo a mirar la vida asombrada, como una nena en el primer día de su jardín de infantes...¡VIVA LA VIDA!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario