refle"j"ionando...

Vienen profetas con cara de ángeles a mi domicilio, diligentemente, con la misión de anunciarme el fin del mundo.
Escucho tronar las trompetas apocalípticas en los más disímiles escenarios.
Gente con cara de susto dice haber soñado nuevos holocaustos.
"La tolerancia es la pasión de los inquisidores", decía mi querido Silvio.
Pitonisas sombrías se calzan los oráculos como armaduras contra la desesperación.
Nigromantes vestidos de salvadores hacen súplicas contritas para prevenir el final de finales.
Mientras la Biblia y los Calefones desfilan largamente ante mis oídos en apariencia impávidos, evoco a un cantautor español, que cuando le preguntaron cómo veía el (M)mundo, y cómo el (P)país, contestó "Prefiero el Sports".
Y ¿sabés qué, Vida? Se venga lo que se venga, prefiero una canción...