viernes, 24 de abril de 2009

canto

Habrá una aurora en el planeta.
A pesar de los pesares. Y del dengue. Y de otras plagas menos ostentosas.
Habrá una aurora en el planeta.
Cuando la vacuidad del instante presente revele ese vacío a todas luces.
Cuando la nada de tanta vidriera se ría de sus mentores.
Cuando esté madura la semilla del tiempo.
Cuando no falten brazos, ni sobren silencios.
Entonces sí: habrá una aurora en el planeta, y los ruegos que tantos alzaran al cielo tocarán tierra firme, trasmutados en vivencias concretas.
Ya se pasó el momento más álgido de la noche planetaria. Ya caducó el auge de respuestas vacías. Ya han hecho su agosto los vendedores de ilusiones.
Y el alivio no llega.
Pero habrá una aurora en el planeta.
Miles de chicos índigo, nacidos sabios, más allá del prejuicio, y en señal de los tiempos, atestiguan sus sueños, montados en la flecha que ha de llevarlos lejos, a concretar quimeras.
Todo está listo, aunque no lo parezca. La comida está pronta y la mesa servida, para la gran fiesta.
Los que queden afuera...bueno: no han aprendido todavía a abrir amplios los brazos y rifar alegrías. No saben todavía que se es CON el otro, y no a expensas de él. No han aprendido todavía lo que la Naturaleza nos enseña, con tanta paciencia, desde hace milenios: que la esencia de la vida es DAR, y que dando y compartiendo se diluyen fronteras, se derrocan misterios, se superan las pesadillas, se construyen los sueños.

1 comentario:

Celuuu dijo...

Hermoso como siempre.

Gracias por habernos ido a ver ayer Ale !

un beso enorme