lunes, 20 de abril de 2009

¿decías?

Si hubiera soñado con un padre
que le pusiera límite al delirio,
si hubiera fantaseado un parricidio
que no dejara dudas de autoría,
si hubiera pergeñado algún silencio
a la espera de que la roca hablara,
no sería tan diáfano el presente
ni tan amplio, ni tan beso en la cara
como esta epifanía que me muestra
la verdad de mi vieja adolescencia;
las cuentas que no pagó la vida
cuando la adolescencia me salteó;
o el canto de cigarras en la noche,
mientras fumo el final pucho del día,
mintiéndome que no habrá más en mi vida,
mintiéndome que soy inmortal, yo.
Si hubiera deambulado por el mundo
en busca de la última verdad,
si hubiera registrado este segundo
apenas como un segundo más;
si hubiera cancelado el almanaque
creyendo cancelar así las deudas,
si hubiera destapado mi destape
para que me enjuiciaran los vecinos,
no sabría de juicios ni de deudas,
ni de viajes, ni de segundos idos.
No sabría del hilo de la noche
tejiéndole una colcha a mi destino.
Ni sabría la ausencia de las flores,
ni el grito sin razón que me asesina.
No me quejo. Obtuve lo que puse
de empeño, de pasión, de resistencia.
Ahora falta sólo el juez que juzgue
porqué me es tan cara la insolencia.

1 comentario:

Celuuu dijo...

A mi me halaga que vos te tomes aunque sea cinco minutitos para leerme !

Hermoso lo que escribís como siempre.

Un beso Ale !