sábado, 22 de diciembre de 2007

para vos, de matinada

Se acabó la batalla.
Se terminó la lidia.
La guerra de los egos
(Joaquín dixit)
murió, virgen de duelos
y de lides.
Atrás quedaron, creo,
escenarios violentos,
con dientes apretados;
resabios de un pasado
que es presente contento.
Si dijera te quiero
corta me quedaría,
porque no hay fantasía
que supere el exceso
del canon de los besos que,
sin darte aún, te he dado.
Porque sos la alegría
de esta musa rebelde,
que hace como que muerde,
mientras caricias pide.
Porque sos el pasaje
a futuros inciertos,
con renacer de muertos
y paz en el planeta.
Porque sos la barriga
repleta, de los que hambre
pasaban antes de que
nos juntara una estrella.
Y sos la buena nueva
de esta ciudad dormida,
que no sabe que canto
a Aznavour, muy bajito,
soñando mil Parises,
remando mil encantos
en tu nariz de mago
que regala varitas
en equilibrio, casi
como mi alma solista,
que se anotó en la lista
de tu amor, sin percance.

1 comentario:

CIEN AÑOS DE IMPUNIDAD. EL BLOG DE EL SUBCOMANDANTE GABO. dijo...

Cuidate de ser la musa de un cobarde avariento y poderoso.
la sopa boba es usted, él la industria.