viernes, 23 de marzo de 2007

interludio

Escuchando a Joan Baez me distraigo: qué harás, mago. Por dónde estarás volando. Qué musas de seda estarán estrujando tu imaginación. Por qué universos de papel empezará a vagar tu verso en pocos días.
¿Sabés? Me gusta imaginarte, lapicera en mano, con los codos clavados sobre tu mesa de trabajo, a las ocho de la mañana.
Entonces, cuando te "veo" así, creando tu magia, arlequín alado de mis sueños secretos, vuelo en silencio hasta tu escritorio; revoloteo sobre las palabras que acabás de estampar en el papel, y aunque hace algún tiempo no tengas ganas de hablarme ni de mirarme, por un momento vuelvo a sentir que los dos somos pasajeros del mismo barco.

No hay comentarios: